un buff de punto, por fin me atreví

hola, hola

Tenía muchas ganas de coger las dos agujas de nuevo después de...treinta años. Buff cómo pasa el tiempo, decidí hacer un buff.

Por cierto, ¿habéis visto que busto me he agenciado? Regalo de Marisa que tiene una tienda de modas monísima en el barrio de San Cristobal, en Vitoria.

 Como lo he hecho a ratitos me ha costado cuatro días pero es rápido de tejer y no tiene demasiada complicación.

Monté 32 puntos de una lana gordita en agujas del nº8 y hacía 12 filas a punto bobo y una a punto jersey y repetí ese patrón 5 veces más. Luego cerré los puntos y cosí los extremos con aguja lanera de manera que no se notara la unión.

En los bordes le hice un punto bajo a ganchillo para que quedaran más uniformes.

Y ya sólo quedaba hacer 8 pompones de colorines para animarlo un poco, ya que iba a ser un regalo de cumpleaños para una amiguita de matrioska mayor.

Me encantó probar una nueva forma de hacer pompones: con un tenedor, os enseña Pepa de Decora Recicla Imagina aquí.

Me gusta mucho el resultado, ha salido un cuellito calentito, mullido y extrasuave.
 Y a vosotras, ¿os gusta?

A Nerea sí y eso es lo mejor de todo.

Llego a tiempo de agradecer a Herminia el premio que me ha otorgado, me ha hecho una ilusión bárbara y lo quiero compartir con todas mis lectoras. No dejéis de visitar el blog de Herminia porque hace unas cosas preciosas, me han impactado sus originales portafotos hechos con piedras forradas a ganchillo, una cucada.